
De la película Un paseo para recordar.
Si fuera así en todos los casos no habría discusiones, peleas, divorcios... Obsesiones, depresiones, angustia, malestar... Inseguridad, amargura, dolor... Sólo amor, tal y como la palabra indica. Los celos no demuestran más arraigo ni cariño, solo ansias de exclusividad, de propiedad de la otra persona. Ni que fuera un objeto. La incondicionalidad a la hora de querer es lo más determinante para amar profundamente.
Aunque de vez en cuando sienta muy bien decir "eres mío" o "soy tuya", la verdad. Qué queréis que os diga...
Un párrafo para recordar, diría yo.
Buenos días, hoy hace sol, y lo voy a aprovechar :).
2 comentarios:
Hola, me llamo María, buscando actividades para mis niños en un taller sobre los modelos de amor engañosos, me he econtrado con tu blog y he de decirte que me ha encantado tu comentario. Ojala ese pensamiento estuviera más extendido y no aquel que dice "quien bien te quiere te hará sufrir" o "si no es celoso es que no me quiere". El amor nunca debe ser sufrido y Como tu bien dices los celos jamás esconden amor sino ¡ansias de exclusividad!
Enhorabuena por tu blog y tu forma de pensar.
Un saludo
Muchísimas gracias, María :), ¡otro saludo para ti!
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