lunes, 7 de abril de 2008

Aquí

Estaba Mayra devorando libros de felicidad, autoestima y pensamiento en general. Hacía mucho que repartía su tiempo entre reflexión filosófica y novela, prácticamente desde el momento en que se dio cuenta que había mucho más allá de la ficción, y los alternaba para los momentos que más le apeteciera un género u otro.
- Cualquier día te vas al Tíbet con los monjes - repuso burlonamente su marido.
- Yo quiero al Tíbet y a los monjes aquí contigo - contestó ella.
¿Por qué? Porque por mucho interés que tuviera en otras cosas, su felicidad estaba con él.

Una respuesta directa al corazón.

No hay comentarios: